lunes, 1 de febrero de 2010

Las redes ¿sociales? (primera parte)

Ya tiene mucho tiempo que no escribo algo acá.

Pasa que con los 140 caracteres puedes intentar resumir tus ideas aunque, supongo que muchas veces no son ideas netamente estructuradas, meditadas y en absoluto concretas a pesar de su reducido número de caracteres, me parece que es casi como la función que tiene un flyer que te dan en la calle. Un pequeño panfleto que te da idea de un "algo" que te puede interesar o no, y con base en eso, investigar más (o no) del asunto.

He pretendido un tema interesante que postear en este descuidado blog, algo con la idea de que alguien lo lea, alguien se interese, mas creo que eso es caer simplemente en la arrogancia y presunción de las redes sociales y algunos de sus participantes.

Me explico.

En esas ondas de twitter y facebook (entre otras), he analizado un poco cuales son las conductas recurrentes de sus usuarios. Y debo decir que lamentablemente, la mayoría de estos, solo tienen un objetivo: "Coleccionar Personas".

Supongo que esa es la razón, motivo, objetivo y fin de las redes sociales. O quizás no.

Cuando abrí facebook, fue por invitación de una muy entrañada amiga, y la única regla que me puse fue que todos mis "amigos" de dicha red deberían ser personas que en realidad conocía físicamente y que hemos compartido al menos una situación relativamente trascendente. Así pues, comencé a encontrar "amigos", compañeros, conocidos y conocidos con sabor a extraños. En realidad soy una persona sumamente sociable y al menos logre contactar a más de 300 "facefriends".

Lo que paso después fue algo decepcionante en realidad.

Supuse que sería una herramienta para recobrar ese lazo que al menos, se había esbozado en algún momento y también para fortalecerlo en el caso de las personas más allegadas a mí, sin embargo, eso poco paso.

Simplemente veía que las personas en esa lista eran felices cada vez que juntaban más y más usuarios en sus listas de "amigos" pero no iban más allá, en ocasiones, ni siquiera veían el perfil del agregado, les basta darle clic a “aceptar”. Me parece una conducta muy similar a quien colecciona algo en la vida, un objeto, un elemento inanimado que por x o y razón, les evoca la necesidad de poseer.

La posesión entonces se enfoco a las personas, pero, ¿Cómo es que puedes coleccionar personas en pleno siglo xxi?

Aquí mi analogía.

Nuestra sociedad es puramente capitalista, está llena de objetivos artificiales, vánales y superfluos. Casi todo nuevo desarrollo, invento, innovación, producto, servicio, estereotipo y modelo es un “tengo que tener-ser” que nos empuja a “esforzarnos” por conseguir y entonces así, “ser alguien” y ganarnos un “status” marcando la diferencia entre el “yo tengo y tu no”, “yo tengo mas”.

Llegan entonces las redes sociales que tienen el objetivo (aparente) de unirnos más como sociedad, hacer nuestras vidas más interactivas, evolucionar los preceptos y conceptos de comunicación y de paso, fomentar las relaciones interpersonales entre los individuos… o al menos, en teoría.

Hay quienes solamente juntan personas, las coleccionan y no les representa más que un numero incremental en un contador que solo le refleja el espejismo de popularidad y que entre más dígitos posea más conocido es. Sin embargo, estas “personas” no buscan entonces fomentar esa nueva relación, no pretende entonces la interacción con ese ente nuevo en su lista de “amigos” y a su vez, el que es agregado ni siquiera espera ni busca dicha interacción. Es así que entonces se forma una sociedad de intercambio efímera; “eres un número para mi, y yo puedo o no, ser un numero para ti”

¿Cuál es entonces “el chiste” de tener tantos amigos si ninguno (o casi ninguno) si quiera intercambiara un “hola”?

En Twitter, en cambio me parece una herramienta más interactiva, un medio más eficaz de interactuar. Y si bien muchas personas continúan con el objetivo de coleccionar “followers” la mayoría me parece mas decidida a “hacerse escuchar” y en realidad comunicar.

Es interesante encontrarse con reflexiones, metáforas, pensamientos, análisis, experiencias, vivencias, etc. y de igual manera noticias, actualizaciones, datos, consejos, etc. Las cuales pueden (o no) aportar algo y entonces compartir (o no) dicho escrito en 140 caracteres o menos.

Se me antoja mucho mas valioso en contenidos que un noticiero en horario prime time de alguna televisora.

…continuara.